El Ayuntamiento de Barcelona ha suspendido las relaciones de la ciudad con el régimen israelí mientras éste continúe su mortífera guerra contra la Franja de Gaza.
El consejo tomó la medida el viernes al adoptar una declaración relevante, que obligaba al régimen a “respetar los derechos básicos del pueblo palestino”, informó la agencia estatal turca Anadolu.
La declaración fue presentada por el partido de extrema izquierda Barcelona en Común de la ex alcaldesa Ada Colau y respaldada por el Partido Socialista de su sustituto Jaume Collboni, así como por el partido separatista de izquierda Esquerra Republicana de Cataluña (ERC).
El régimen israelí lanzó la guerra el 7 de octubre tras una operación, denominada Tormenta de Al Aqsa, llevada a cabo por los grupos de resistencia de Gaza.
La Oficina de Medios del Gobierno en Gaza anunció en un informe el jueves que al menos 14.854 palestinos, incluidos más de 6.150 niños y 4.000 mujeres, han muerto y más de 36.000 han resultado heridos en los ataques israelíes.
Tel Aviv también ha bloqueado el flujo de agua, alimentos y electricidad hacia Gaza, sumiendo a la franja costera en una crisis humanitaria.
La declaración del viernes condenó todos los ataques contra la población civil, así como “cualquier castigo colectivo, desplazamiento forzado, destrucción sistemática de viviendas e infraestructura civil, así como el bloqueo de energía, agua, alimentos y suministros médicos a la población de la Franja de Gaza”. “
Según la declaración aprobada por Barcelona, los principales obstáculos para una paz duradera son “la ocupación y colonización de los territorios palestinos” y la “negación de derechos” al pueblo.
Otros miembros de alto perfil del gobierno español, incluida la ex ministra Ione Belarra, han censurado el “silencio ensordecedor” de su país y de otros aliados occidentales del régimen israelí sobre la feroz guerra de Tel Aviv contra Gaza.
También el jueves, Belarra, que fue apartada de su cartera ministerial debido a las críticas de principios de semana, dijo en una publicación en X, antiguo Twitter, que ella y sus colegas estaban “preocupados” de que un viaje realizado por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez a los territorios ocupados anteriormente “se podría utilizar para blanquear [Israeli Prime Minister Benjamin] Netanyahu, que es un criminal de guerra”.